Jano

Esta divinidad romana, no tiene equivalente en la mitología griega. Es el dios de las puertas, de la iniciación  y de los nuevos comienzos. Su orígen es etrusco y recibía diversos nombres dependiendo de su función: Ianus en su faceta sacerdotal; Quirinus para los profanos y Arkhanus( misterioso, oculto) es el nombre que guarda una connotación iniciática.Se dice que fue el rey más antiguo del Lacio. Algunas versiones dicen que nació en Atenas y que cuando se convirtió en hombre dirigió una expedición al Lacio donde hizo varias conquistas y fundó una ciudad a la que llamó Janícula. Fuera como fuere su llegada al reino, se dice que un día Saturno, expulsado del cielo, se refugió en sus territorios. Tal fue la acogida de Jano que Saturno, agradecido, decidió concederle el conocimiento del pasado y del porvenir, por eso se le suele representar con dos cabezas, una mirando al pasado y otra al porvenir. Se le representa, además, con una llave en una mano y un bastón en la otra, lo primero significa que abre la puerta del año,  por esto se le consagraban el mes de enero, que llamaban "Ianuarius" y este a pasado a nuestra lengua como Enero, y lo segundo que preside en los caminos.

En Roma había un templo dedicado a él que permanecía cerrado en tiempos de paz y que el cónsul vestido con una trábea quirinal abría una vez declarada la guerra. Dentro del templo, en el centro, había una estatua suya que miraba hacia las dos puertas: la de occidente y la de oriente. Esta posición simboliza su dominio sobre las actividades humanas. Las puertas abiertas solicitaban al dios equilibrio. Este templo estaba cerrado con cien cerrojos y barras de hierro a fin de que fuera más difícil abrirlo y esto simbolizaba que jamás  se debía emprender una guerra a la ligera. Después de que el cónsul abriera sus puertas, el pueblo penetraba en el templo y golpeaban los escudos sagrados llamados "ancilia" e invocaban a Marte.