lunes, 19 de diciembre de 2011

El Basilisco



El Basilisco  era una criatura mítica que originariamente tenía apariencia de pequeña serpiente.  Su nombre deriva del griego basileus(rey) y significa "pequeño rey", de hecho, también es conocido como “Rey de las Serpientes y en la antigua Roma se le llamaba “regulus” no solo por la corona con la que se le representaba sino también por su capacidad de matar con una sola mirada y porque estaba cargado de un veneno letal.   Posteriormente se le ha representado de diferentes maneras pero siempre con características reptilianas.


representación del Basilísco
típica de la Edad antigua
Según Pierre de Beauvais nace de un huevo deforme puesto por un gallo e incubado por un sapo durante nueve años y es por eso que al nacer guardaba semejanza con ambos pues tenía cabeza de gallo, cuerpo de sapo y cola de serpiente pero según el mito más conocido sobre su nacimiento nacía de un huevo puesto por un gallo e incubado por una serpiente y al nacer tenía cuerpo de gallo, lengua y cola de serpiente.


El hábitat del Basilisco era el desierto que el mismo creaba rompiendo piedras, quemando los pastos con el fuego que exhalaba de su boca y envenenando plantas y ríos.
Pero sin duda su característica más distintiva es su capacidad de matar con la mirada. De este modo se dice que quien mirara a los ojos de un basilisco, moriría y si lo viera por un reflejo quedara petrificado. Ni siquiera el mismo era inmune a su mirada, si el Basilisco se veía reflejado en un espejo , se mataba a sí mismo. Algunas leyendas dicen que, así, Alejandro Magno mató a uno. Existe también  un mito que narra la historia de un caballero que durante una plaga de estas criaturas en su país, decidió enfrentarse a ellos con una armadura hecha con espejos y así logró derrotarlos a todos. Otras formas de acabar con ellos eran  si oían el canto de un gallo o si se topaba con su principal enemigo: la comadreja





1 comentarios:

Escuela de estimulos dijo...

Que bicho más asqueroso. Sobre todo la parte de la cabeza de rana...